Sobre la base de la limitada evidencia disponible, la edad por sí sola no debería ser un factor limitante en el tratamiento de la psoriasis. Es muy importante el conocimiento de las comorbilidades y el uso concomitante de medicación, así como la dosificación adecuada y la monitorización clínica y de laboratorio frecuente. Más evidencia del mundo real y (sub) análisis de estudios de cohortes prospectivos sobre la efectividad y seguridad de las terapias sistémicas en adultos mayores son fundamentales para optimizar el tratamiento antipsoriásico personalizado, eficaz y seguro en este grupo de pacientes en crecimiento. JAMA Dermatol. 19 de agosto de 2020