Asociación de morbilidad materna grave durante el primer parto con los partos posteriores
En este estudio de cohortes de base poblacional realizado en Suecia se observó que las mujeres que experimentan morbilidad materna grave en su primer parto tienen menos probabilidades de tener un parto posterior. El asesoramiento reproductivo adecuado y la mejora de la atención prenatal son cruciales para las mujeres con estos antecedentes. JAMA, 25 de noviembre de 2024.
Resumen
Importancia: Las mujeres que experimentan morbilidad materna grave (MMG) pueden tener problemas de salud duraderos, y se desconoce la asociación de la MMG con la probabilidad de futuras intenciones reproductivas.
Objetivo: Examinar la asociación entre la MMG en un primer parto y la probabilidad de un parto posterior.
Diseño, entorno y participantes: Estudio de cohorte poblacional retrospectivo realizado entre 1046974 mujeres en Suecia que tuvieron su primer parto entre 1999 y 2021.
Exposición: Se identificaron la MMG general y los subtipos de MMG entre todos los partos a las 22 semanas de gestación o más tarde (incluidas las complicaciones dentro de los 42 días posteriores al parto) del Registro Médico de Nacimientos de Suecia y el Registro Nacional de Pacientes.
Resultados y medidas principales: Se hizo un seguimiento de todas las mujeres con un primer parto registrado desde los 43 días posteriores al parto hasta el primer día del último período menstrual del segundo embarazo que resultó en un nacimiento (muerte fetal o nacimiento vivo) o hasta la muerte, la emigración o el final del seguimiento el 31 de diciembre de 2021. Se utilizó la regresión de riesgos proporcionales de Cox multivariable para estimar las asociaciones entre la MMG y el tiempo hasta el parto posterior con razones de riesgo ajustadas (aHR). Se realizó un análisis de hermanos para evaluar la posible confusión genética y familiar.
Resultados: Un total de 36790 mujeres (3,5%) experimentaron una condición de MMG en su primer parto. Las mujeres con cualquier MMG tuvieron una tasa de incidencia más baja de parto posterior en comparación con aquellas sin MMG en su primer parto (136,6 frente a 182,4 por 1000 personas-año), con un aHR de 0,88 (IC del 95%, 0,87-0,89). La probabilidad de un parto posterior fue sustancialmente menor entre las mujeres con rotura uterina grave (HRa, 0,48; IC del 95 %, 0,27-0,85), complicaciones cardíacas (HRa, 0,49; IC del 95 %, 0,41-0,58), accidente cerebrovascular (HRa, 0,60; IC del 95 %, 0,50-0,73) y trastornos graves de salud mental (HRa, 0,48; IC del 95 %, 0,44-0,53) en su primer parto. Las asociaciones no se vieron influidas por factores de confusión familiares, como lo indican los análisis entre hermanos.
Conclusiones y relevancia: Nuestros hallazgos sugieren que las mujeres que experimentan MMG en su primer parto tienen menos probabilidades de tener un parto posterior. El asesoramiento reproductivo adecuado y la mejora de la atención prenatal son cruciales para las mujeres con antecedentes de MMG.
El artículo original:
Tsamantioti E, Sandström A, Lindblad Wollmann C, Snowden JM, Razaz N. Association of Severe Maternal Morbidity With Subsequent Birth. JAMA. Published online November 25, 2024. doi:10.1001/jama.2024.20957
Disponible en: https://n9.cl/07u2iq