Avances en el tratamiento de la artritis psoriásica en adultos
Esta revisión describe las herramientas de evaluación y las medidas de resultado utilizadas en la evaluación de los pacientes con artritis psoriásica. Resume el enfoque de la terapia, incluidas las intervenciones no medicinales como la educación, los cambios en el estilo de vida, la fisioterapia y la terapia ocupacional. Se discute la evidencia sobre los tratamientos farmacológicos, incluidos los fármacos utilizados para el alivio sintomático, como los antiinflamatorios no esteroideos, y los utilizados para controlar el proceso de la enfermedad. BMJ 21 de noviembre de 2024
La artritis psoriásica es una artritis inflamatoria que afecta a alrededor del 30% de los pacientes con psoriasis. El espectro de la enfermedad incluye artritis periférica, entesitis, tenosinovitis, dactilitis, afectación axial y psoriasis cutánea y ungueal en la mayoría de los pacientes. Además de las manifestaciones cutáneas y musculoesqueléticas, varias comorbilidades pueden complicar el curso de la enfermedad, como la enfermedad cardiovascular, la diabetes mellitus, el síndrome metabólico, la gota, la ansiedad y la depresión. El tratamiento de los pacientes con artritis psoriásica comienza con una evaluación cuidadosa de la piel y las articulaciones y la detección de comorbilidades. Esta revisión describe las herramientas de evaluación y las medidas de resultado utilizadas en la evaluación de los pacientes con artritis psoriásica. Resume el enfoque de la terapia, incluidas las intervenciones no medicinales como la educación, los cambios en el estilo de vida, la fisioterapia y la terapia ocupacional. Se discute la evidencia sobre los tratamientos farmacológicos, incluidos los fármacos utilizados para el alivio sintomático, como los antiinflamatorios no esteroideos, y los utilizados para controlar el proceso de la enfermedad; este último grupo comprende los fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME) sintéticos convencionales, como el metotrexato, la leflunomida y la sulfasalazina, y los FARMD biológicos y dirigidos, como el factor de necrosis tumoral (TNFα), la interleucina-17 (IL-17), los agentes anti-IL-12/23 y anti-IL-23, así como los inhibidores de la quinasa Janus (JAK) y los antagonistas de la fosfodiesterasa 4 (PDE4). Aunque estos fármacos suelen adaptarse al perfil clínico del paciente, se necesitan biomarcadores predictivos de la respuesta a la terapia para poder seguir un abordaje más personalizado.
la revisión
Kharouf F, Gladman D D. Advances in the management of psoriatic arthritis in adults BMJ 2024; 387 :e081860 doi:10.1136/bmj-2024-081860
disponible en: https://n9.cl/lr7cq