Consejos médicos de influencers en las redes sociales: respondiendo a los desafíos de salud pública que plantean
Los autores de este artículo sostienen que el asesoramiento médico de los influencers a menudo está determinado por múltiples sesgos y sugieren cómo reducir los riesgos asociados. La supervisión es importante, pero un monitoreo y una regulación efectivos son difíciles porque las experiencias de los usuarios son personalizadas, moldeadas por algoritmos opacos y, a menudo, cruzan fronteras nacionales fuera del alcance de la regulación. BMJ, 3 de diciembre de 2025
Los influencers de redes sociales se han vuelto poderosos en un ecosistema de información digital moldeado por algoritmos de plataformas e incentivos comerciales. Los influencers son personas con un gran número de seguidores en redes sociales, obtenidos mediante la publicación de contenido atractivo y entretenido, pero muchos también se han convertido en importantes fuentes de información sobre salud. Sus trayectorias abarcan desde profesionales de la salud cualificados hasta personas sin formación médica, y su alcance abarca desde unos pocos miles de seguidores hasta millones. Más del 70 % de los adultos jóvenes en EE. UU. siguen a influencers, y más del 40 % ha comprado productos siguiendo sus recomendaciones. En Austria, el 83 % de los jóvenes de entre 15 y 25 años afirma haber visto contenido de influencers relacionado con la salud, y el 31 % ha comprado suplementos dietéticos, el 13 % medicamentos y el 11 % autopruebas médicas como resultado.
La fiabilidad de los consejos de los influencers varía considerablemente. Por ejemplo, un estudio reciente reveló que las publicaciones de influencers y empresas sobre pruebas médicas populares con evidencia incierta y riesgos de uso excesivo eran principalmente promocionales, citando beneficios en el 87 % de los casos, pero mencionando perjuicios solo en el 15 %. Otro estudio sobre la promoción de suplementos dietéticos por parte de influencers alemanes reveló que aproximadamente dos tercios de las dosis recomendadas excedían las recomendaciones nacionales de seguridad y el 7 % superaba los límites máximos de seguridad de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria. Estos consejos pueden causar daños psicológicos, físicos, financieros y sistémicos, desde autodiagnósticos erróneos y tratamientos inadecuados hasta gastos innecesarios y mayores costos de atención médica.
La información proporcionada por influencers puede estar sujeta a cuatro fuentes de sesgo: falta de experiencia médica o conocimiento relevante, influencia de la industria, intereses empresariales y sesgos personales. El efecto de estos sesgos se ve magnificado por la capacidad de los influencers de formar vínculos reales o unilaterales (a menudo denominados "parasociales") con sus seguidores, lo que los convierte en comunicadores altamente persuasivos. Por lo tanto, la supervisión es importante, pero un monitoreo y una regulación efectivos son difíciles porque las experiencias de los usuarios son personalizadas, moldeadas por algoritmos opacos y, a menudo, cruzan fronteras nacionales fuera del alcance de la regulación.
El artículo original
Heiss R, Woloshin S, Dave S, Engel E, Gell S, Willis E et al. Responding to public health challenges of medical advice from social media influencers BMJ 2025; 391 :e086061 doi:10.1136/bmj-2025-086061
Disponible en: https://n9.cl/lynv7