¿Los antivirales directos curan la hepatitis C?

Este comentario resalta que a pesar de la eficacia para negativizar la carga viral, todavía no está confirmado el impacto sobre la mortalidad y otras complicaciones de la enfermedad.

British Medical Journal, 10 de mayo de 2018

A nivel mundial, se estima que 71 millones de personas tienen infección crónica por hepatitis C, lo que corresponde a una prevalencia del 1,6%  Casi 400 000 personas con hepatitis C crónica mueren cada año, principalmente por cirrosis y carcinoma hepatocelular. En los Estados Unidos, la hepatitis C es la causa más común de enfermedad hepática crónica y la indicación más frecuente de trasplante de hígado.

Los antivirales de acción directa (AAD) son medicamentos relativamente nuevos que han sido aclamados como una cura para la hepatitis C. Los AAD se dirigen a proteínas específicas del virus de la hepatitis C, interrumpiendo así la replicación. Los medicamentos se toman por vía oral y la duración del tratamiento varía entre ocho y 24 semanas. El régimen de AAD elegido se basa en varios factores, incluido el genotipo infeccioso y las mutaciones virales preexistentes, la historia natural y el estadio de la enfermedad, la disponibilidad de fármacos, el historial de tratamiento previo y los posibles efectos adversos.

Las directrices de la Asociación Estadounidense para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas, la Asociación Europea para el Estudio del Hígado y la Organización Mundial de la Salud recomiendan el tratamiento precoz con AAD para todos los pacientes con hepatitis C crónica. Estas directrices definen el tratamiento exitoso como respuesta virológica sostenida -es decir, la incapacidad de demostrar el ARN del virus de la hepatitis C en la sangre 12-24 semanas después del final del tratamiento y posteriormente.

Sin embargo, las implicaciones clínicas de lograr una respuesta virológica sostenida no están claras. La evidencia para usar la respuesta virológica sostenida como un marcador sustituto para la mejora en la mortalidad, el cáncer de hígado y las complicaciones relacionadas con el hígado consiste en estudios observacionales que a menudo no se controlan y están sujetos a confusión. El uso de la palabra "cura" no es adecuado porque algunos pacientes que logran una respuesta virológica sostenida pueden recaer años más tarde con virus genéticamente idénticos, lo que sugiere que el virus existía de manera latente en el cuerpo durante ese tiempo y los pacientes que logran una respuesta virológica sostenida pueden progresar a enfermedad hepática en etapa terminal.

No está claro si los AAD ofrecen un beneficio clínico significativo en términos de reducción de las complicaciones relacionadas con la hepatitis y la mortalidad en estos pacientes.

Lo que necesita saber:

Los AAD son medicamentos relativamente caros que se han promovido como una cura para la hepatitis C crónica.

No hay pruebas suficientes para juzgar si los AAD reducen la mortalidad u otras complicaciones relacionadas con el hígado de la hepatitis C crónica.

Discuta con su paciente el beneficio clínico incierto, y los riesgos y costos de estos medicamentos, para tomar una decisión compartida sobre el tratamiento.

El artículo original:

Jakobsen Janus Christian, Nielsen Emil Eik, Koretz Ronald L, Gluud Christian. Do direct acting antivirals cure chronic hepatitis C? BMJ 2018; 361 :k1382

Disponible en: http://bit.ly/2rGb7TD