Manejo de la vejiga hiperactiva

INFAC Volumen 26 • no 10 • 2018 CEVIME, 4 de marzo de 2019 La ambigua definición de vejiga hiperactiva puede suponer un riesgo innecesario de medicalización

INFAC Volumen 26 • no 10 • 2018

CEVIME, 4 de marzo de 2019

La vejiga hiperactiva (VH) se define como un síndrome clínico caracterizado por la presencia de urgencia miccional, aislada o en combinación con incontinencia urinaria de urgencia, junto con un aumento de la frecuencia miccional y nicturia, en ausencia de otra enfermedad demostrable. La urgencia es el síntoma cardinal y necesario para que se pueda pensar que un paciente1 presenta una VH . La gravedad se determina en función de la frecuencia de los episodios de urgencia y de los escapes involuntarios secundarios 2 . No es preciso que se presente incontinencia urinaria de urgencia, puesto que solo un tercio de los pacientes con VH la presentan; esta proporción es algo más frecuente en las mujeres 1,2 .

La VH puede tener un impacto negativo sobre la calidad de vida de los pacientes y sus familiares o cuidadores, ya que afecta a las funciones sociales, sexuales, a las relaciones interpersonales y a la vida laboral 3 .

Las cifras de prevalencia de la VH son muy variables debido a la ambigüedad de su definición y a las diferencias metodológicas de los estudios. En población general, a nivel internacional, oscilan entre 11,8 y 22%, según los estudios. En España, la prevalencia se estima en el 6% en mujeres entre 25-64 años y el 4,6% en varones entre 50 y 64 años. En personas mayores de 65 años institucionalizadas, llega casi al 40% en mujeres y al 35% en varones 2,3 .

La definición compleja y poco precisa de VH abarca un amplio espectro de síntomas cuyas causas subyacentes son muchas veces poco conocidas. Esto hace que se llegue al diagnóstico por exclusión, con el riesgo de que se pueda etiquetar como enfermas a personas que presentan síntomas leves o no patológicos, con altas tasas de remisión y que a menudo son susceptibles de “watchful waiting” (espera vigilada), lo que evitaría la sobremedicalización, con sus efectos adversos y costes innecesarios 4 .

De hecho, en el País Vasco, más de 22.000 personas están en tratamiento con algún fármaco para la incontinencia urinaria, de las cuales un 26% tienen además prescritos absorbentes de incontinencia urinaria, lo que resulta bastante paradójico.

En este boletín se revisan las medidas no farmacológicas, así como la eficacia y seguridad de los medicamentos utilizados en esta patología. 

Sumario

Introducción

Etiopatogenia

Diagnóstico

Tratamiento

Tratamiento no farmacológico

Tratamiento farmacológico

Otras alternativas 

el boletin completo en http://bit.ly/2UlSAIh

 

Compartir