Metodología Lean Six Sigma para prevenir errores de medicación

Boletín de Prevención de Errores de Medicación,Vol. 16, n.º 4

Generalitat de Catalunya. Departament de Salut, abril de 2019

La metodología Lean Six Sigma (LSS) se desarrolló en la década de los ochenta de la mano de Motorola, aunque no sería esta empresa la que la popularizaría, sino General Electric, que mejoró además la rentabilidad de sus procesos. LSS aúna las fortalezas del método Lean, centrado en el incremento de la productividad y la eficiencia por medio de la puesta del foco del flujo de valor sobre el cliente (o el paciente en nuestro entorno), con la metodología Six Sigma, mediante la cual se promueve la sistematización y la disminución de la variabilidad a la vez que se trata de alcanzar el estándar de excelencia representado con el nivel 6 de Sigma (equivalente a 3,4 defectos por cada millón de oportunidades de error [DPMO])

En el ámbito sanitario, alcanzar el nivel 6 de Sigma en un proceso es impensable, debido a la importante implicación humana y a la alta complejidad que revisten estos procesos. Tras analizar la literatura publicada, se puede afirmar que el nivel 4 de Sigma es el nivel de eficiencia al que hay que aspirar.

Como puede observarse en las gráficas, la tasa de mejora sigue una escala logarítmica, por lo que la progresión en los procesos que se sitúen en los tres primeros niveles de Sigma es más fácilmente observable que en los que se clasifican en los tres últimos.

Para abordar la problemática de los procesos, la metodología LSS se sustenta en las etapas del ciclo DMAIC (por sus siglas en inglés):

Definir (define): establecer los objetivos numéricos que deben cumplirse para cada indicador seleccionado y designar el equipo de trabajo multidisciplinar.

Medir (measure): cuantificar la situación de partida mediante los indicadores establecidos. potencial.

Analizar (analyze): identificar las causas raíz de los problemas detectados y reestructurar los procesos implicados.

Mejorar: Implantar medidas correctoras y mejoras

Controlar (control): definir un sistema en procedimiento el que se mantengan las mejoras implementadas. Desarrollar un método que facilite la monitorización de los indicadores

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