Asociación entre consumo de alimentos ultraprocesados ​​y deterioro cognitivo

Un mayor porcentaje de consumo diario de energía de alimentos ultraprocesados ​​se asoció con deterioro cognitivo entre adultos de una muestra étnicamente diversa. Estos hallazgos respaldan las recomendaciones actuales de salud pública sobre la limitación del consumo de alimentos ultraprocesados ​​debido a su daño potencial a la función cognitiva. JAMA Neurol.  5 de diciembre de 2022

Importancia   Aunque el consumo de alimentos ultraprocesados ​​se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, síndrome metabólico y obesidad, se sabe poco sobre la asociación del consumo de alimentos ultraprocesados ​​con el deterioro cognitivo.

Objetivo   Investigar la asociación entre el consumo de alimentos ultraprocesados ​​y el deterioro cognitivo en el Estudio Longitudinal Brasileño de Salud del Adulto.

Diseño, ámbito y participantes   Este fue un estudio de cohorte prospectivo multicéntrico con 3 olas, aproximadamente con 4 años de diferencia, de 2008 a 2017. Los datos se analizaron desde diciembre de 2021 hasta mayo de 2022. Los participantes fueron servidores públicos de 35 a 74 años de edad reclutados en 6 ciudades brasileñas. Se excluyeron los participantes que, al inicio del estudio, tenían datos incompletos del cuestionario de frecuencia de alimentos, cognitivos o de covariables. También se excluyeron los participantes que informaron una ingesta calórica extrema (<600 kcal/día o >6000 kcal/día) y aquellos que tomaban medicamentos que podrían interferir negativamente con el rendimiento cognitivo.

Exposiciones   Consumo diario de alimentos ultraprocesados ​​como porcentaje de la energía total dividida en cuartiles.

Principales resultados y medidas   Cambios en el rendimiento cognitivo a lo largo del tiempo evaluados mediante las pruebas de recuerdo de palabras inmediatas y tardías, reconocimiento de palabras, fluidez verbal fonémica y semántica, y la versión B de la prueba Trail-Making.

Resultados   Un total de 15 105 personas fueron reclutadas y 4330 fueron excluidas, dejando 10 775 participantes cuyos datos fueron analizados. La edad media (DE) al inicio del estudio fue de 51,6 (8,9) años, 5880 participantes (54,6 %) eran mujeres, 5723 (53,1 %) eran blancos y 6106 (56,6 %) tenían al menos un título universitario. Durante una mediana (rango) de seguimiento de 8 (6-10) años, las personas con consumo de alimentos ultraprocesados ​​por encima del primer cuartil mostraron una tasa de deterioro cognitivo global un 28 % más rápida (β = −0,004; IC del 95 %, −0,006 a −0,001; P  = 0,003) y una tasa de disminución de la función ejecutiva un 25 % más rápida (β = −0,003, IC del 95 %, −0,005 a 0,000; P  = 0,01) en comparación con los del primer cuartil.

Conclusiones y relevancia   Un mayor porcentaje de consumo diario de energía de alimentos ultraprocesados ​​se asoció con deterioro cognitivo entre adultos de una muestra étnicamente diversa. Estos hallazgos respaldan las recomendaciones actuales de salud pública sobre la limitación del consumo de alimentos ultraprocesados ​​debido a su daño potencial a la función cognitiva.

El estudio

Gomes Gonçalves N, Vidal Ferreira N, Khandpur N, et al. Association Between Consumption of Ultraprocessed Foods and Cognitive Decline. JAMA Neurol. Published online December 05, 2022. doi:10.1001/jamaneurol.2022.4397

https://bit.ly/3uumY75

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