Efecto del ejercicio físico en la enfermedad de Alzheimer. Una revisión sistemática

La mayoría de los estudios incluidos no permiten conocer la repercusión del ejercicio físico a nivel cognitivo y sobre los cambios estructurales y funcionales cerebrales en pacientes con riesgo de desarrollar la EA o en pacientes que ya presentan la enfermedad. Sin poder descartase un posible efecto beneficioso, son necesarios más estudios con un mejor diseño y rigor metodológico que permitan un mejor conocimiento de esta asociación. Atención Primaria, mayo de 2020

Objetivo

El propósito de este estudio es investigar la evidencia científica sobre el efecto del ejercicio físico respecto al estado cognitivo y conductual como medida preventiva y terapéutica no farmacológica en la enfermedad de Alzheimer (EA).

Diseño Revisión sistemática

Fuentes de datos: Pubmed, Science Direct, Medline y Scopus, con las palabras clave: Alzheimer, Exercise, Neuroimaging, MRI, PET y Physical Activity.

Selección de artículos: Se incluyeron aquellos estudios en los que se evaluaba el efecto del ejercicio físico en la evolución de la EA y que además contenían pruebas de imagen (resonancia magnética nuclear o tomografía por emisión de positrones) con marcador Pittsburg Compound B (PiB) analizando la atrofia cerebral o el aumento del depósito de beta-Amiloide respectivamente. Se excluyeron aquellos estudios en otros tipos de demencia que no fueran la EA, los que no incluían pruebas de neuroimagen, los casos únicos y aquellos de lengua no inglesa. Para la extracción de datos se utilizó la escala de calidad PRISMA para la lectura crítica de los estudios. Los investigadores evaluaron de forma independiente los artículos y las discrepancias se resolvieron por consenso.

Resultados Se identificaron 75 artículos, de los cuales 23 fueron finalmente incluidos en la revisión.

Concusiones La mayoría de los estudios incluidos no permiten conocer la repercusión del ejercicio físico a nivel cognitivo y sobre los cambios estructurales y funcionales cerebrales en pacientes con riesgo de desarrollar la EA o en pacientes que ya presentan la enfermedad. Sin poder descartase un posible efecto beneficioso, son necesarios más estudios con un mejor diseño y rigor metodológico que permitan un mejor conocimiento de esta asociación.

El trabajo original

María Ángela Agüera Sánchez,  Miguel Ángel Barbancho Ma y Natalia García-Casares Efecto del ejercicio físico en la enfermedad de Alzheimer. Una revisión sistemática

Atención Primaria 2020,  52 (5):307-318,

Disponible en https://bit.ly/3g33RIL

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