La ingesta regular de té se asocia a una menor mortalidad general
En este estudio observacional realizado en el Reino Unido se encontró que una mayor ingesta de té se asoció con un menor riesgo de mortalidad entre los que bebían 2 o más tazas al día, independientemente de la variación genética en el metabolismo de la cafeína. Estos hallazgos sugieren que el té, incluso en niveles más altos de ingesta, puede ser parte de una dieta saludable. Annals of Internal Medicine, 30 de agosto de 2022.
Antecedentes: el té se consume con frecuencia en todo el mundo, pero la asociación del consumo de té con el riesgo de mortalidad sigue sin ser concluyente en las poblaciones donde el té negro es el principal tipo de consumo.
Objetivo: evaluar las asociaciones del consumo de té con la mortalidad por todas las causas y por causas específicas y la modificación del efecto potencial por la variación genética en el metabolismo de la cafeína.
Diseño: estudio de cohorte prospectivo.
Ámbito: Biobanco del Reino Unido.
Participantes: 498 043 hombres y mujeres de 40 a 69 años que completaron el cuestionario de pantalla táctil de referencia de 2006 a 2010.
Mediciones: consumo de té autoinformado y mortalidad por todas las causas y principales causas de muerte, incluido el cáncer, todas las enfermedades cardiovasculares (ECV), cardiopatía isquémica, accidente cerebrovascular y enfermedades respiratorias.
Resultados: durante una mediana de seguimiento de 11,2 años, una mayor ingesta de té se asoció modestamente con un menor riesgo de mortalidad por todas las causas entre quienes bebían 2 o más tazas al día. En relación con no beber té, los cocientes de riesgos instantáneos (IC del 95 %) para los participantes que bebieron 1 o menos, 2 a 3, 4 a 5, 6 a 7, 8 a 9 y 10 o más tazas al día fueron 0,95 (IC del 95 % , 0,91 a 1,00), 0,87 (IC, 0,84 a 0,91), 0,88 (IC, 0,84 a 0,91), 0,88 (IC, 0,84 a 0,92), 0,91 (IC, 0,86 a 0,97) y 0,89 (IC, 0,84 a 0,95 ), respectivamente. Se observaron asociaciones inversas para la mortalidad por todas las ECV, cardiopatía isquémica y accidente cerebrovascular. Los hallazgos fueron similares independientemente de si los participantes también bebían café o no o de la puntuación genética para el metabolismo de la cafeína.
Limitación: no se evaluaron los aspectos potencialmente importantes de la ingesta de té (por ejemplo, el tamaño de la porción y la concentración del té).
Conclusión: una mayor ingesta de té se asoció con un menor riesgo de mortalidad entre los que bebían 2 o más tazas al día, independientemente de la variación genética en el metabolismo de la cafeína. Estos hallazgos sugieren que el té, incluso en niveles más altos de ingesta, puede ser parte de una dieta saludable.
Fuente de financiación principal: Programa de Investigación Intramuros del Instituto Nacional del Cáncer.
El artículo original:
Maki Inoue-Choi, Yesenia Ramirez, Marilyn C. Cornelis, et al; Tea Consumption and All-Cause and Cause-Specific Mortality in the UK Biobank: A Prospective Cohort Study. Ann Intern Med. [Epub 30 August 2022]. doi:10.7326/M22-0041
Disponible en: https://bit.ly/3R6ipJR