La vacuna para la fiebre amarilla mantiene su eficacia con sólo un quinto de la dosis habitual

Un nuevo estudio confirma hallazgos previos que permiten alcanzar una mayor cobertura en situaciones en que la provisión de vacuna se encuentra limitada. New England Journal of Medicine, 1° de agosto de 2019.

Resumen

Antecedentes: en 2016, la respuesta a un brote de fiebre amarilla en Angola y la República Democrática del Congo provocó una escasez mundial de la vacuna contra la fiebre amarilla. Como resultado, se ofreció una dosis fraccional de la vacuna contra la fiebre amarilla 17DD (que contiene un quinto [0.1 ml] de la dosis estándar) a 7.6 millones de niños de 2 años de edad o mayores y adultos no embarazadas en una campaña preventiva en Kinshasa. El objetivo de este estudio fue evaluar la respuesta inmune a la dosis fraccional en una campaña a gran escala.

Métodos: reclutamos participantes en estratos de cuatro edades en seis sitios de vacunación. Evaluamos los títulos de anticuerpos neutralizantes contra el virus de la fiebre amarilla en muestras de sangre obtenidas antes de la vacunación y al mes y 1 año después de la vacunación, utilizando una prueba de neutralización de reducción de placa con un límite del 50% (PRNT50). Los participantes con un título PRNT50 de 10 o más se consideraron seropositivos. Aquellos con un título inicial de menos de 10 que se volvieron seropositivos en el seguimiento fueron clasificados como seroconvertidos. Los participantes que fueron seropositivos al inicio del estudio y que tuvieron un aumento en el título por un factor de 4 o más en el seguimiento se clasificaron como que tenían una respuesta inmune.

Resultados: entre 716 participantes que completaron el seguimiento de 1 mes, 705 (98%; intervalo de confianza [IC] del 95%, 97 a 99) fueron seropositivos después de la vacunación. Entre 493 participantes que fueron seronegativos al inicio del estudio, 482 (98%; IC95% 96 a 99) se seroconvirtieron. Entre 223 participantes que fueron seropositivos al inicio del estudio, 148 (66%; IC95%, 60 a 72) tuvieron una respuesta inmune. Los títulos iniciales más bajos se asociaron con una mayor probabilidad de tener una respuesta inmune (P <0.001). Entre 684 participantes que completaron el seguimiento de 1 año, 666 (97%; IC 95% 96 a 98) fueron seropositivos para el anticuerpo contra la fiebre amarilla. La distribución de títulos entre los participantes que fueron seronegativos para el anticuerpo de la fiebre amarilla al inicio del estudio varió significativamente entre los grupos de edad a 1 mes y a 1 año (P <0.001 para ambas comparaciones).

Conclusiones: una dosis fraccional de la vacuna contra la fiebre amarilla 17DD fue efectiva para inducir la seroconversión en los participantes que fueron seronegativos al inicio del estudio. Los títulos permanecieron por encima del umbral de seropositividad al año después de la vacunación en casi todos los participantes que fueron seropositivos al mes después de la vacunación. Estos hallazgos respaldan el uso de la vacuna de dosis fraccionada para el control de brotes. (Financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades).

El artículo original:

Casey RM, Harris JB, Ahuka-Mundeke S, et al. Immunogenicity of fractional-dose vaccine during a yellow fever outbreak — final report. N Engl J Med 2019; 381:444-454. DOI: 10.1056/NEJMoa1710430

Disponible en: http://bit.ly/2ZysLri

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