Tendencias en el uso de analgésicos recetados entre adultos con afecciones musculoesqueléticas en los Estados Unidos de 1999 a 2016
La sustitución de los opioides por analgésicos no opioides entre 2003 y 2006 puede haberse producido a medida que surgieron pruebas sobre los riesgos cardiovasculares asociados con los analgésicos no opioides. Las reducciones en el uso de opioides entre 2013 y 2016 fueron más importantes entre las personas con bajo nivel socioeconómico, que pueden encontrar barreras para acceder a alternativas. A pesar de esas disminuciones, el uso de opioides siguió siendo más frecuente en 2015 a 2016 que en 1999 a 2000, lo que sugiere una cola potencialmente larga para la epidemia de opioides. JAMA Netw Open. 2019;.
Pregunta ¿Cómo cambió el uso de analgésicos recetados entre los adultos de EE. UU. con una posible necesidad de controlar el dolor por afecciones musculoesqueléticas de 1999 a 2016?
Conclusiones En este análisis transversal repetido de datos representativos a nivel nacional de 7256 adultos, el uso de analgésicos opioides y no opioides exhibió tendencias recíprocas, con disminuciones en el uso de analgésicos no opioides compensados por los aumentos en el uso de opioides.
Significado La sustitución de los opioides por analgésicos no opioides puede haber ocurrido a medida que surgieron pruebas sobre los riesgos cardiovasculares asociados con los analgésicos no opioides y, a pesar de las recientes disminuciones, el uso de opioides continuó siendo más frecuente en el 2016 que en 1999.
Resumen
Importancia El seguimiento de las tendencias en el uso de analgésicos recetados entre adultos con afecciones musculoesqueléticas proporciona una idea de cómo los cambios en las prácticas de prescripción, las pautas y las medidas políticas pueden afectar a quienes necesitan controlar el dolor.
Objetivo Evaluar las tendencias en el uso de opioides recetados y el uso de analgésicos no opioides en adultos con limitaciones funcionales atribuibles a afecciones musculoesqueléticas.
Diseño, ámbito y participantes Este estudio transversal repetido utiliza datos del Estudio Nacional de Examen de Salud y Nutrición de 1999 a 2016. Los datos se analizaron de enero a julio de 2019. Los participantes eran adultos de 30 a 79 años que informaron limitaciones funcionales debido a problemas de espalda o cuello y / o artritis o reumatismo.
Desenlaces y medidas principales Cualquier uso de un opioide recetado o uso exclusivo de un analgésico no opioide recetado.
Resultados En esta población de 7256 adultos con 1 o más limitaciones funcionales atribuibles a una condición musculoesquelética (4226 mujeres [59.9%]; 3508 [74.4%] individuos blancos no hispanos; mediana [rango intercuartil] edad, 63 [53-70] años), el uso de opioides y el uso exclusivo de analgésicos no opioides exhibieron patrones de cambio aproximadamente recíprocos de 1999 a 2016. El uso de opioides aumentó significativamente (diferencia en la prevalencia para 2015-2016 frente a 1999-2000, 7.2%; IC 95%, 1.3% a 13% ; P para tendencia = .002), y el uso exclusivo de analgésicos no opioides disminuyó significativamente (diferencia en la prevalencia para 2015-2016 frente a 1999-2000, −13%; IC 95%, −19% a −7.5%; P para tendencia < .001) durante este período. El aumento en cualquier uso de opioides fue impulsado por el uso a largo plazo en lugar de a corto plazo. Se produjo un cruce en la prevalencia del uso de opioides y el uso exclusivo de analgésicos no opioides entre 2003 y 2006, después de lo cual el uso de opioides fue más frecuente. Entre 2013 y 2016, se observaron disminuciones en el uso de opioides entre los hombres (diferencia en la prevalencia para 2015-2016 frente a 2013-2014, −11%; IC del 95%, −21% a 1.8%) y participantes con educación inferior a la secundaria (diferencia, −15%; IC 95%, −24% a −6.1%). Durante este mismo período, el uso exclusivo de analgésicos no opioides también disminuyó notablemente en la población (diferencia, −5.3%; IC del 95%, −9.1% a −1.5%).
Conclusiones y relevancia La sustitución de los opioides por analgésicos no opioides entre 2003 y 2006 puede haberse producido a medida que surgieron pruebas sobre los riesgos cardiovasculares asociados con los analgésicos no opioides. Las reducciones en el uso de opioides entre 2013 y 2016 fueron más importantes entre las personas con bajo nivel socioeconómico, que pueden encontrar barreras para acceder a alternativas. A pesar de esas disminuciones, el uso de opioides siguió siendo más frecuente en 2015 a 2016 que en 1999 a 2000, lo que sugiere una cola potencialmente larga para la epidemia de opioides.
el trabajo
Stokes A, Berry KM, Hempstead K, Lundberg DJ, Neogi T. Trends in Prescription Analgesic Use Among Adults With Musculoskeletal Conditions in the United States, 1999-2016. JAMA Netw Open. 2019;2(12):e1917228. doi:https://doi.org/10.1001/jamanetworkopen.2019.17228