Opioides, del poco uso... al abuso

Ojo de Markov número cincuenta y nueve - marzo 2017 Autora: Belén Calabozo Freile, CIM-SACYL, 1 de marzo de 2017 Este número del Ojo de Markov incluye un comentario al el último informe de la AEMPS ha sido del 84% entre 2008 y 2015. Y discute algunos de los factores que han contribuido a este cambio y plantea Claves para evitar el abuso y mal uso de opioides

Ojo de Markov número cincuenta y nueve - marzo 2017

Autora: Belén Calabozo Freile, CIM-SACYL, 1 de marzo de 2017

 

 Este número del Ojo de Markov incluye un comentario al el último informe de la AEMPS ha sido del 84% entre 2008 y 2015.  Y discute algunos de los factores que han contribuido a este cambio.

Los apartados son

·         Introducción

·         ¿Qué opioides son los más utilizados?

·         Selección de opioides

·         Utilización de fentanilo en Castilla y León

·         Riesgo de abuso en el tratamiento prolongado con opioides

 

 

Y transcribimos el último apartado:

Claves para evitar el abuso y mal uso de opioides

El uso inadecuado de opioides se produce sobre todo en pacientes no oncológicos, quizás por su mayor supervivencia y cronificación de los tratamientos, y es más probable en pacientes más jóvenes.

Los puntos clave para evitar el mal uso y abuso de opioides son:

·         Prescripción cauta de opioides de acción rápida, en especial de fentanilo.

·         Valorar el riesgo de adicción mediante escalas de medición como la COMM (Current Opioid Misuse Measure) o la SOAPP-R (Screener and Opioid  Assesment for Patients with Pain) para detectar conductas aberrantes con los opioides, sobre todo en pacientes de mayor riesgo (jóvenes, con trastornos psiquiátricos, historias de abuso, etc.) Imprescindible con fentanilo de liberación rápida.

·         Vigilar a los pacientes que reciben dosis altas, tratamientos prolongados y en riesgo de abuso.

·         Aceptar que existe elevada tasa de fracaso al tratamiento con opioides y que incrementar la dosis no va a cambiar la falta de respuesta.

·         Tener en cuenta la variabilidad interindividual. Se han identificado polimorfismos genéticos que podrían explicar, en parte o totalmente, las variaciones en eficacia y toxicidad entre individuos.

·         No combinar opioides mayores o menores con benzodiacepinas.

·         Derivar a unidades especializadas cuando se usen opioides a dosis altas, 180 mg de morfina o dosis equivalentes.

·         Informar a los pacientes y a sus familiares sobre los riesgos asociados al uso crónico de opioides.

·         Comunicar a farmacovigilancia todos los casos de sobredosis y adicción detectados.

El número completo en http://bit.ly/2lhk30i

 

Compartir