El tratamiento de la enfermedad de Parkinson es sintomático y no existen terapias curativas, modificadoras de la enfermedad o neuroprotectoras. Debe abordarse de forma multidisciplinar, individualizada y consensuada con el paciente; incluyendo terapia farmacológica, medidas complementarias y en su caso, tratamientos invasivos. Boletín Terapéutico Andaluz, marzo de 2024