En este ensayo clínico de pacientes de alto riesgo que se habían sometido a angioplastia percutánea, una estrategia de seguimiento con pruebas funcionales de rutina, incluyendo ergometría, cámara gamma o ecocardiograma de estrés, no mejoró los resultados clínicos a los 2 años, en comparación con la atención estándar. New England Journal of Medicine, 28 de agosto de 2022.