La incontinencia fecal puede tener consecuencias sociales, psicológicas y laborales sustanciales para los pacientes, y puede afectar sus relaciones con otras personas, incluidas las parejas y los hijos. El tratamiento puede adoptar un enfoque gradual e individualizado dentro de la atención primaria, e incluye cambios en la dieta, medicación antidiarreica como la loperamida y ejercicios del suelo pélvico. BMJ, 3 de marzo de 2025