Introducción El estreñimiento es uno de los síntomas digestivos más frecuentes en la consulta de atención primaria, pudiendo afectar de manera importante a la calidad de vida de los pacientes1,2. Su prevalencia es elevada, siendo más frecuente en mujeres, en ancianos, en personas con estatus socio-económico bajo y en pacientes con depresión1.
Se podría definir el estreñimiento como un cambio, real o percibido, del hábito intestinal, que resulta insatisfactorio para el paciente, debido a la disminución de la frecuencia de las deposiciones, la dificultad de paso de heces duras o la evacuación intestinal incompleta3.
Existen unos criterios diagnósticos de estreñimiento crónico (Criterios Diagnósticos Roma III) que se utilizan principalmente en el campo de la investigación.