· La vacuna de AstraZeneca es segura y efectiva y previene de la hospitalización y muerte por COVID-19.
· Es importante resaltar que ya disponemos de estudios de efectividad que sitúan tanto la vacuna de Pfizer como la AstraZeneca por encima del 80% en la reducción de hospitalización por COVID-19.
· La seguridad de las vacunas se vigila de manera continua, con la finalidad de proteger a la población y asegurar que los beneficios de su utilización superan los riesgos.
· La investigación de los casos notificados de trombosis tras la vacunación con AstraZeneca realizada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha concluido que el beneficio de la vacunación supera sus potenciales riesgos.
· Se va a continuar profundizando en el estudio de los mecanismos que han podido producir ciertos casos específicos y raros de acontecimientos adversos que se han notificado.
· Hay que recordar que el dolor de cabeza, malestar, febrícula, mialgias, así como náuseas y vómitos, son frecuentes tras la vacunación, y que pueden tratarse con paracetamol. Estos síntomas no suelen durar más que unos pocos días.
· Las personas que en los días siguientes a la vacunación presenten dolor de cabeza intenso y persistente que aumenta con el movimiento y al tumbarse, así como petequias o moratones fuera del lugar de inyección, deben acudir a su centro médico de referencia
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