En este ensayo clínico aleatorizado se estudió una estrategia de analizar los niveles de vitamina D en población general y suplementar aquellas personas con niveles subóptimos, para reducir el riesgo de infección respitaroria aguda o COVID-19. Los resultados no difirieron de los obtenidos en el grupo de control. La prevalencia poblacional de 86.3% para el déficit de 25-OH vitamina D (definido como menor de 30 ng/ml) renueva el cuestionamiento de utilizar ese nivel de corte como indicador para las acciones preventivas o terapéuticas. British Medical Journal, 7 de septiembre de 2022.