Farmacología

Eficacia y efectividad de la vacuna COVID-19: el elefante (no) en la habitación

21 abril 2021

Las consideraciones sobre eficacia y efectividad se basan en estudios que miden la prevención de la infección por COVID-19 leve a moderada; no se diseñaron para concluir sobre la prevención de la hospitalización, enfermedades graves o la muerte, o sobre la prevención de la infección y el potencial de transmisión. La evaluación de la idoneidad de las vacunas debe considerar todos los indicadores e involucrar la seguridad, la implementación, disponibilidad y costos. Lancet, 20 de abril de 2021

Protección de los anticuerpos para SARS-CoV-2 contra la reinfección

20 abril 2021

En este estudio se siguieron durante seis semanas unos 3.000 jóvenes reclutas, realizando PCR y serología viral en forma repetida.  Aquellos con anticuerpos basales contra SARS-CoV-2 tuvieron un riesgo 80% menor de reinfectarse durante ese lapso. La infección previa provee una protección sustancial pero no completa contra la reinfección. The Lancet Respiratory Diseases, 15 de abril de 2021.

Respuesta a la vacuna COVID19 en mujeres embarazadas y lactantes: un estudio de cohorte

20 abril 2021

Las vacunas de ARNm de COVID-19 generaron una sólida inmunidad humoral en mujeres embarazadas y lactantes, con inmunogenicidad y reactogenicidad similar a la observada en mujeres no embarazadas. Las respuestas inmunitarias inducidas por la vacuna fueron significativamente mayores que la respuesta a la infección natural. La transferencia inmune a los recién nacidos se produjo a través de la placenta y la leche materna. Am J Obstet Gynecol. 24 de marzo de 2021

Infodemia sobre las vacunas contra COVID-19

19 abril 2021

5 momentos de la comunicación que afectarían la percepción del riesgo y la aceptación de la vacunación. DIME Boletín #40, Abril 17 de 2021

Diez razones científicas en apoyo de la transmisión aérea del SARS-CoV-2

16 abril 2021

proponemos que es un error científico utilizar la falta de evidencia directa del SARS-CoV-2 en algunas muestras de aire para poner en duda la transmisión aérea mientras se pasa por alto la calidad y solidez de la base de evidencia general. Existe evidencia sólida y consistente de que el SARS-CoV-2 se propaga por transmisión aérea. Aunque otras rutas pueden contribuir, creemos que es probable que la ruta aérea sea la dominante. La comunidad de salud pública debe actuar en consecuencia y sin más demora.  Lancet, 15 de abril de 2021

Categorias